Núcleo de la Tierra - Corazón de la Tierra - Cristal central

Corazón de la Tierra

La Tierra misma es un ser holístico, vivo, consciente, altamente evolucionado y amoroso. Los principios de la creación y la evolución siempre parten del núcleo, que, como almacén, portador y generador de información energética, es el amor creativo.

En lo más interno de la Tierra se encuentra el cristal pensante multifacético, el Núcleo-Corazón de la Tierra, que suministra su energía a todas las actividades vitales.

La activación del cristal central de la Tierra comenzó en 2012. Este es un proceso esencial para la Tierra y la humanidad.

Las personas que también activan su propio sistema de cristales se permiten sincronizarse con el Plan de la Tierra y, en armonía con la Tierra, alcanzar los niveles de frecuencia más elevados.

La transformación que estamos viviendo ahora es la transformación de un grupo de almas que ya han experimentado la conciencia del corazón.

Los investigadores hacen un descubrimiento sensacional

El núcleo terrestre constituye la base del campo magnético terrestre, protector de la vida en la Tierra. Sin la interacción entre el núcleo interno, sólido, y el núcleo externo, líquido, el campo magnético terrestre no existiría.

Hasta ahora, los geólogos asumían que el núcleo terrestre, incluyendo su capa metálica, estaba compuesto por cristales sólidos de hierro. Sin embargo, análisis recientes muestran que el interior del núcleo terrestre contiene otro núcleo interno de forma cristalina.

Dióxido de silicio en lugar de aleación de hierro

Además del hierro, el dióxido de silicio también podría cristalizar en el núcleo terrestre. Los elementos más ligeros del núcleo externo se comportan de forma bastante diferente a lo esperado.

En lugar de formar aleaciones de hierro, el silicio y el oxígeno podrían reaccionar entre sí y cristalizar en dióxido de silicio, el compuesto que forma la arena de cuarzo.

Si se confirma este resultado de los experimentos de alta presión, esta cristalización podría incluso ser una fuerza impulsora del geodinamo, como informan los investigadores en la revista “Nature”.

El legendario diamante "Esperanza" podría provenir del manto interior de la Tierra

Los diamantes se forman en el manto terrestre, entre la corteza y el núcleo terrestre, por la presión y las altas temperaturas, y encuentran su camino hacia la superficie, generalmente a través de erupciones volcánicas.

La mayoría de los diamantes provienen de una profundidad de 150 a 200 km.

El legendario diamante "Esperanza", según muestra un estudio, proviene de una profundidad de más de 660 km.

Un examen de diamantes similares confirmó las suposiciones de que su origen se encuentra en el manto interior de la Tierra.