Ciencia: el verdadero conocimiento que crea claridad

"El conocimiento es poder: depende de lo que hagas con él"

La Conciencia Cristal

Hay seres infelices que tienen corazón para el sufrimiento, pero no para el amor. Etienne Rey

Del laberinto del sufrimiento


El desarrollo del alma, como instrumento holístico de conocimiento, es el proceso más importante que una persona debe reconocer y perseguir conscientemente para posibilitar su transformación. La única manera de lograrlo es reconocer la importancia de la energía del corazón. La dimensión del corazón no conoce tiempo ni límites.


La mente, en una posición dominante, siempre encuentra un campo de acción donde manipula hábilmente a las personas e intercambia la Verdadera Voluntad del Alma por el poder del ego. Esto altera la calidad de la energía vital, que fluye hacia las personas no desde la fuente del Creador (amor), sino desde la fuente de la energía del miedo.


Esta sustitución de valores ocurre en la primera infancia cuando los adultos (a menudo inconscientemente) imponen programas de comportamiento negativos en sus hijos. Por ejemplo, «El amor hay que ganárselo», «No soy lo suficientemente bueno», «Amar es sufrir», etc. Los niños pierden su confianza natural para dar y recibir amor.


Estos programas destructivos causan dolor y frustración en la persona, y estas energías a menudo se manifiestan en formas depresivas o agresivas.


El sufrimiento constante es muy doloroso para el alma, y para protegerse de la destrucción, intenta

Guiar a las personas por el camino correcto.


Ella envía todo tipo de mensajes llamándolo a renunciar al poder del ego, a abrir las puertas del corazón y a sentir el amor del Creador.


Si una persona ignora todos sus esfuerzos y hace caso omiso de sus mensajes, puede decidir abandonar el cuerpo humano por su cuenta.

"De toda la música terrenal, el latido de un corazón verdaderamente amoroso es el más cercano al cielo".

Henry Beecher

En la conciencia cristalina


Cuanto más a menudo una persona percibe la voz de su alma y se entrega a su voluntad, más comienza a expandirse su propia conciencia y a asemejarse a la estructura de un cristal.


Comprender los diversos aspectos de la vida ayuda a que el cristal de la consciencia humana sea más multifacético y puro. Cuanto más puras sean las facetas de este cristal, más luz podrá conducir, recibir y reflejar energías de alta vibración.

Estas energías le ayudan a alcanzar la armonía y a darse cuenta de que la búsqueda de la perfección es infinita.


El camino hacia la sanación interior, la felicidad y la plenitud sólo pasa por un corazón abierto y dispuesto a dar amor con profunda gratitud.